Un frase o pequeño poema del escritor
del siglo de oro español Baltasar Gracián nos sirve de ejemplo para mostrar
cual es una raíz de conflictos dentro de la empresa.
“Triste es no tener amigos, Pero
más triste debe ser el no tener enemigos, Porque el que enemigos no tenga,
señal es que no tiene: Ni talento que haga sombra, Ni carácter que impresione,
Ni valor temido, Ni honra de la que murmuren, Ni bienes que se codicien, Ni
cosa buena que se le envidie”.
Con este bonita frase extraemos
que una fuente principal del conflicto es la envidia y que la persona que actué
correctamente en su puesto de trabajo puede estar fomentando, sin saberlo, un conflicto
en el futuro.
Así que todo lo que pueda
provocar envidia, cosas tan simples como una plaza de aparcamiento, aumento de
sueldo, ascensos, etc … es posible que cree un conflicto entre compañeros y que
podrían derivar en problemas para la empresa o para un determinado departamento.
Por lo tanto, el directivo debe
saber gestionar este posible conflicto, antes
de que ocurra, estableciendo unas pautas de recompensas bien determinadas y conocida
por todos los empleados. Así de este modo evitará las disconformidades internas
de las personas que pudieran afectar a la buena marcha del departamento y
enrarecer el ambiente de trabajo con decisiones de recompensa aparentemente
subjetivas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario